Lo primero a saber es que Color se pronuncia Cólor, con acento en la primera ó. Segundo, que en persona habla como canta: clara, directa, sin imposturas en el tono y la voz. Creadora y dj residente de la Fiesta Sudan, donde se ganó el mote cariñoso de “la Jefa” entre sus cofrades, a fines de 2018 Color decidió apostar por su sueño. Y desde entonces, lanzada al género urbano, publicó 1, 2, 3, 4 canciones (hasta ahora) que revelan el gusto por el ritmo que te mueve suave y las historias de dos que se (des)encuentran. Algo distintivo en “Fuego”, “Corazones rotos”, “2 de la mañana” y “Vos y yo” es que se puede construir una identidad sin tener que agredir al resto, ni decir soy la mejor de todas.
El jueves 10 de octubre, Color hará su debut en La Tangente con un show que promete coreografías, performances y la entrada a un mundo rosado, perla y pastel.
¿Cómo y cuándo nace Color?
Primero nació el apodo, hace 9 años ya. Cuando yo tenía 19, trabajaba en MSTRPLN, la fiesta que se hacía en Crobar, con Javier Zuker y Andii16. El chiste era ponernos un apodo del usuario y como mi usuario de Twitter era @colordelsol, entonces Javi empezó a decirme Cólor y así me presentaron a todo el mundo. Ahí empezó a nacer el personaje, que ya estaba metido en la música pero no sabía que se iba a dedicar a eso. Explotaba ahí en la fiesta, yo hacía de host, coordinaba un grupo de públicas, invitaba gente, estaba siempre en la cabina agitando. Y ahí, gracias a ellos, empecé a aprender un poquito de dj y a poner música de hobby.
Después de eso, tardé bastante en darme cuenta de que quería ser música. Lo tenía tan incorporado, era tan parte de mí que no lo veía como mi vocación. Empecé primero con el Ableton a tirar ruiditos y hacerme la que producía cosas. Paralelamente empecé a estudiar baile y canto. Y entonces dije: «Ah, me parece que acá hay algo, me gusta». Eso fue hace 3 o 4 años, hasta que finalmente el año pasado dije: «bueno, me voy a hacer cargo: es esto y tengo que apostar». Obviamente hay mucho miedo atrás de perseguir el sueño de uno, así que me llevó bastante tiempo hacerme cargo.
¿Qué sería “princesa pero piola”, la frase con la que empieza “Fuego” y que está en la bio de tu perfil? ¿De qué está hecho ese universo?
Es una frase que va de la mano con el lema de Sudan, que es «Perreo intenso, fino y elegante». Es algo urbano, pero a la vez tiene una fineza. Entonces mi «soy princesa pero piola», es sí, soy fina, soy una princesa, pero no soy una boludita. No por ser princesa, se me caen los anillos. Sí, quiero cosas de princesa, y me gusta todo eso, pero para mí la princesa piola es Leia, que es la única que no necesita un príncipe que la rescate sino que es ella la que va al frente.
¿Qué tienen en común ser dj y ser cantante?
Tienen muchas similitudes, pero estoy intentando separarlo un poco. Y ahora el show de La Tangente es la prueba de eso, tocar fuera de mi casa que es Sudan, en Niceto. Ahora ya no me pasa, pero antes cuando subía a tocar como dj a un escenario, me daban bastantes nervios. Y ahora siendo artista me pasa lo mismo.
La convocatoria es parecida: yo tengo algo para ofrecerle a la gente y la gente viene y consume eso. En ese sentido estoy un poco entrenada. Lo que pasa es que la fiesta y ser dj es algo que me sale mucho más natural, no es mi sueño y mi verdadera vocación, me encanta hacerlo. En cambio, ser artista tiene otra seriedad, donde se ponen en juego muchas cosas de mí y me implica más responsabilidad porque se trata de quién soy y qué quiero hacer. Ser host es algo que tengo adentro, me gusta y me divierte y se une en estos dos caminos.
¿Qué estás preparando para el show de La Tangente?
La idea es jugar mucho con la escenografía. Para mí un show no es solo ir a verme cantar. Quiero brindar algo más que eso. Color es artista no solo de hacer canciones, es artista de pensar los videos, el estilismo, los outfits, las ideas creativas. Y me pasa lo mismo con un show, quiero pensar todo lo que sucede alrededor. Es importante para mí poder armar algo conceptual, una puesta en escena donde el mundo acompañe la historia que quiero contar. Por ahí no creés en los dragones, pero yo quiero armar un mundo donde si vos ves un dragón en el escenario pienses que existen. Habrá mucho perfo, bailarines, coreografías y hasta un Torino en el escenario. Cuando dije «voy en esta», pensé quiero ir grande, no chiquita, como Beyoncé en el Super Bowl. La Tangente me pareció la mejor opción para un show íntimo, y más apto para familia o para otro público que no es tanto de la fiesta. Me pareció que era el lugar que a mis viejos les iba a gustar ir a verme, y quiero que vengan porque no vinieron la vez anterior que el show era a las 2 de la mañana y en un boliche.
¿Qué les podés contar sobre la Fiesta Sudan a quienes no fueron nunca?
El 14 de septiembre la fiesta cumplió 2 años. Es un bebé crecido ya. Es una fiesta que se hace en Niceto quincenal o mensualmente. Surgió después de un viaje que hice a Barcelona. El día que volví me escribió un productor, César Palmiero, diciéndome que quería hacer una fiesta. Él también había vuelto de Europa y había visto lo que es la escena de música urbana, con millones de opciones para salir todas las noches. Y acá pasaba que lo que yo quería escuchar no estaba en los lugares, así que le dije que sí. Me ofreció ser la dj residente de la fiesta, y me dijo que quería hacer algo con música urbana y música negra, con mucha presencia femenina. Un adelantado César porque esto lo pensó hace 2 años y medio atrás.
Cuando estábamos a un mes de hacer la fiesta, me avisa que se va a vivir afuera. En ese momento me deprimí un poco, pero él me dijo que pruebe de hacerla sola. Hablando con mi mamá, llegué a la conclusión de hacerla igual. Pensé “si me sale mal, anoto todos los errores y me saldrá mejor la próxima”. Y así fue, arrancamos en el Lado B de Niceto. La primera fiesta fue una bomba, la segunda también, y creo que a la edición 6 nos pasamos al Lado A.
Lo de «perreo intenso, fino y elegante» nació con el correr de las ediciones. Con César siempre habíamos dicho que la base era la música negra (dancehall, dembow, hip hop) pero que podíamos darnos gustos tipo guilty pleasures. Y en la tercera edición puse un tema de Don Omar y la gente se copó mucho. Después volví al hip-hop y al trap, y vino un amigo y me dijo: «no, volvé a lo que estabas haciendo». Y entonces empecé a tirar unos reggaetones más. Así que Sudan y la gente de Sudan me obligaron a convertirme en una dj de reggaetón. Yo no era una dj de reggaetón.
¿Qué tenés en común con Babygirl y Sofía Hervier, las dos cantantes que hacen featuring en tus temas?
A las tres nos une lo urbano, y es un urbano que está dentro de esa fineza que te digo de princesa pero piola, porque ninguna hace trap o rap o algo muy callejero. Es más tirando al pop. En la misma línea también me gustan Coral Casino y Lxs Familia. Además para mí es un buen ejercicio y un desafío intentar mezclarme con otras personas para ver cómo lo hacen ellos y desde qué lugar hablan sin que deje ser mío.
De los 4 temas publicados, 3 hablan de la cabeza, ¿por qué se da?
Mis letras son mucho mi cabeza. Es lo que me pasa a mí. Hago un poco de catarsis cuando escribo. Generalmente hablo sobre relaciones amorosas, trato de desdramatizarlas y hacerlas frescas poniéndolas en canciones y en situaciones naturales. Cuando escribo es lo que siento, lo que pienso, cómo me relaciono con las personas, así que tiene mucho sentido que aparezca la palabra “cabeza”.
En un género como el urbano es más común hablar de “tú”. ¿Por qué elegís hablar de “vos” en tus canciones?
Hace poco estábamos grabando con un amigo y me dijo que él escribía en neutro. Y yo le dije: «hacé lo que quieras, pero yo te voy a decir de vos en el tema”. El mercado pide neutro, pero hay muy poco argentino y para mí ahí está lo lindo. Canciones que digan «tú y yo» hay 78.000, canciones que digan «vos y yo» no sé cuántas hay. En cuanto a idioma, como argentinos tenemos mucho para aportar, porque sonamos distinto al resto de América Latina, y es un plus. Aparte no me hallo diciendo tú porque yo no hablo así. Sería impostar. Es que de verdad soy yo. No me sale hacerlo de otra manera.
Color se presenta el jueves 10 de octubre a las 21 hs. en La Tangente, Honduras 5317.
EXTRA: EL ORIGEN DEL «FUEGO»
La letra de “Fuego” salió de la nada. En el estudio, el productor Tomás Susevich me propuso: «vos escribí cosas de las que quieras hablar o palabras que te gusten, y ahí vemos». Después leyó todo lo que yo había escrito y me dijo «acá hay algo que puede ser el estribillo”. Y quedó: “Aunque acá haya fuego / no te va a quemar”. Ese día en el estudio intenté hacer la letra pero no me salía nada. Llegué a mi casa, estaba en la computadora y me fui a mi rincón del living con un anotador, hice trá-trá-trá y bajó toda la letra entera, de una. Después fuimos al estudio, intentamos cambiarla un poco, pero nada salía mejor que la primera tirada.